CNN
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La policía de Kenia comenzó a exhumar los restos de más de una docena de tumbas sospechosas en el este del país que se cree que contienen seguidores de un culto cristiano que creían que irían al cielo si se morían de hambre.
El jueves, detectives de homicidios marcaron parches de tierra con palos y cinta amarilla en el bosque de Shakahola en el condado de Kilifi, cerca del lugar donde la policía rescató a 15 miembros de la Iglesia Good News International la semana pasada, según imágenes difundidas por Citizen TV.
La policía comenzó a exhumar los cuerpos el viernes, dijo Charles Kamau, un detective de la cercana ciudad de Malindi, sin dar más detalles.
El líder de la iglesia, Paul Mackenzie, fue arrestado luego de un aviso que también sugería la existencia de tumbas poco profundas pertenecientes a al menos 31 de los seguidores de Mackenzie.
El abogado de Mackenzie no pudo ser contactado de inmediato para hacer comentarios.
La policía dijo que a los 15 fieles rescatados se les había dicho que se mataran de hambre para poder conocer a su creador.
Cuatro de ellos murieron antes de llegar al hospital.
Titus Katana, exmiembro de la iglesia, ayudó a la policía a identificar las tumbas.
“Le hemos mostrado las tumbas a la policía, y además, le hemos salvado la vida a una mujer a la que le quedaban pocas horas, de lo contrario también estaría muerta”, dijo Katana a Citizen TV.
Matthew Shipeta de Haki Africa, un grupo de derechos humanos, dijo que había visto al menos 15 tumbas poco profundas en el bosque.
Helen Mikali, directora de un hogar infantil que también ayudaba a los investigadores, dijo que había visitado varias aldeas cercanas donde habían desaparecido padres e hijos.
“Personalmente he visitado cerca de 18 tumbas de niños”, dijo Mikali a Citizen TV. No dijo cómo sabía que las tumbas contenían restos de niños.
El mes pasado, la policía arrestó y luego liberó a Mackenzie, a quien identificaron como Paul Nthenge Mackenzie, por alentar a los padres de dos niños a matar de hambre y asfixiar a sus hijos hasta la muerte.
Durante una comparecencia ante el tribunal en ese caso, Nthenge dijo que no estaba al tanto de los eventos que llevaron a la muerte de los dos niños y agregó que fue objeto de propaganda hostil de algunos de sus antiguos colegas, informó el periódico The Standard.
