La gobernadora Kathy Hochul anunció el jueves que a dos semanas de haber adoptado nuevas medidas en el presupuesto estatal, su gobierno cuenta con la fuerza necesaria para combatir el mercado ilegal de productos de cannabis.
“La competencia ilegal es un problema grave para esta nueva industria”, dijo Hochul acerca de los establecimientos que sin licencia estatal ofrecen productos que contienen THC, la sustancia psicoactiva derivada de la marihuana.
Las nuevas medidas incluyen multas de 10,000 dólares por día para los negocios, 20,000 en multas subsecuentes y el cierre con candado de los espacios comerciales y más problemas legales para los propietarios de esos inmuebles.
“El estado penalizará a los empresarios, no a sus clientes o empleados”, aseguró la gobernadora.
«Las tiendas que venden cannabis ilegalmente ponen en peligro la salud y la seguridad, y socavan nuestro trabajo para crear una industria legal del cannabis equitativa.
«Gracias a las nuevas competencias garantizadas en nuestro presupuesto, me enorgullece anunciar que ya hemos incautado productos ilícitos por valor de casi 11 millones de dólares», escribió además la gobernadora en un mensaje en redes sociales.
Los escaparates que venden cannabis ilegalmente ponen en peligro la salud y la seguridad, y socavan nuestro trabajo para crear una industria de cannabis legal y equitativa.
Gracias a los nuevos poderes asegurados en nuestro presupuesto, me enorgullece anunciar que ya hemos incautado casi $11 millones en productos ilícitos. pic.twitter.com/t4DGu3P29H
— Gobernadora Kathy Hochul (@GovKathyHochul) 22 de junio de 2023
Empleados como un latino que trabaja en una tienda sin licencia y quien nos pidió no revelar su identidad.
«La gente necesita trabajar y la gente necesita pagar su renta. Es un tiempo muy duro para todo el mundo», dijo el trabajador.
Los usuarios sabrán quién tiene licencia por un letrero visible frente a sus tiendas, conteniendo un código QR que los clientes pueden escanear para verificar en línea que el establecimiento cuenta con la licencia estatal para operar y que sus productos cumplen con los requisitos de seguridad.
La mano dura es bienvenida por muchos neoyorquinos.
«Si no tienen licencia, ya las deben de cerrar, porque a veces no respetan en la calle y tú ves que cuando la gente va a comprar en público no se comportan bien», dijo Tomás Licea.
El Concejo Municipal calcula que son aproximadamente 1,500 los establecimientos que venden productos de cannabis sin licencia en los cinco condados.
