Con el lema «Nuestra casa nuestra opción», los dueños de casa protestaron en contra de la ley de la Ciudad que les dificulta tener la oportunidad de poner sus viviendas en alquiler por poco tiempo en aplicaciones como Airbnb.
“Eso no es una ley, eso es una persecución contra la clase media y la gente honrada y trabajadora de la Ciudad”, dice Will Gómez.
El grupo llamado “Restaurar la Autonomía y los Derechos de los Dueños de Casa” se manifestó hace unos días frente a la Alcaldía de Nueva York, exigiendo que se revoque la Ley Local 18. La medida entró en vigencia en enero y el gobierno municipal estaba listo para comenzar a hacer cumplir la ley este mes.
Will Gómez tiene una casa de dos familias donde recibió personas a través de Airbnb. Explica que si se le impide hacer eso, tendrá consecuencias financieras significativas.
“No ver con qué pagar la hipoteca, no hay con qué pagar los impuestos. básicamente soy yo y mi familia, que es bien numerosa, se verá obligada a irse de la ciudad de Nueva York».
Entre las regulaciones, ahora se requiere que los propietarios se registren con la Ciudad para usar sus hogares como alquileres a corto plazo, un proceso que los dueños dicen que no es fácil.
“Es imposible lograr que usted lo apruebe. ¿Por qué? Porque te dicen «Oh, acá está la planilla», pero tú tienes que cumplir con millas de leyes extras de las cuales tú no eres primero, ni abogado segundo, ni experto legal para tener un conocimiento tan extenso de las cosas”, agrega Gómez .
Los cambios de la ley dicen que los alquileres de corto plazo están dañados negativamente a los hoteles pero estos defensores dicen que eso no es cierto
“Los que usan normalmente el Airbnb en Nueva York, que la mayoría son extranjeros y no pueden pagar el precio que los hoteles piden”, dice Asia Madera.
Los que están del otro lado del tema también dicen que al exigir los alquileres a corto plazo, se abrirían más espacios que dicen que se necesitan a medida que la Ciudad enfrenta una crisis de vivienda.
Quienes hablaron en la manifestación también dijeron que muchos de estos alquileres a corto plazo se encuentran en comunidades de bajos ingresos, lo que da como resultado que los huéspedes gasten en la economía local.
Si la Ley Local 18 no se anula, dicen, podría tener efectos negativos para ellos.
“Una opción que estoy considerando es vender la casa. Porque no va a haber manera de pagar una hipoteca tan alta”, dice Asia Madera.
Nos comunicamos con la oficina de Cumplimiento Especial de la alcaldía de la Ciudad que hace cumplir estas regulaciones, pero aún no hemos recibido respuesta.
