La propietaria de la guardería de El Bronx, Grei Méndez, de 36 años y un vecino, Carlisto Acevedo Brito, de 41, fueron arrestados y acusados el sábado por la noche de asesinato, homicidio involuntario, agresión y varios cargos de drogas, dijo la policía.
Esto después de la muerte de Nicholas Dominici de un año de edad, de origen dominicano, tras aparente exposición a opioides.
Según varios informes que no han sido confirmados por la policía, Acevedo Brito sería primo de la dueña de la guardería y la policía estaría buscando al esposo de Méndez en relación con este incidente.
TE PUEDE INTERESAR:
La concejal de El Bronx, Pierina Sánchez, llegó hasta el vecindario y mostró su indignación ante esta tragedia.
«No hay límites ahora, también en un ‘daycare’ puede pasar algo así como ha pasado aquí. No es tan solo una injusticia, es algo inhumano», dijo la concejal.
Cuando los servicios de emergencia llegaron a la guardería el viernes por la tarde, administraron Narcan a tres niños que «no respondían y mostraban síntomas de exposición a opioides».
Entre los menores, un niño de 2 años y una niña de 8 meses lograron recuperarse, pero el niño de un año fue declarado muerto en el Hospital Montefiore.
Ese mismo día llevaron a casa a otro niño de 2 años. Al llegar a casa el niño estaba «letárgico y no respondía» y lo llevaron a un hospital cercano donde le administraron Narcan, según dijeron las autoridades.
Residentes del sector reaccionaron preocupados por sus hijos y nietos, como en el caso de Gertrudis Rodríguez.
 ES BX Day Care Arrest CG_127481399_3451)
Rodríguez.
«Es algo muy preocupante en verdad cuando ya hasta en los lugares donde están pequeños que son indefensos que se den este tipo de situaciones», dijo la vecina.
Y tanto ella como otras madres consideran que es necesario hacer una revisión a los procesos y medidas de seguridad en las guarderías.
«Es algo que deben inspeccionar, investigando siempre el día a día las licencias y si están al día y están capacitados para hacer este tipo de trabajo», agregó Rodríguez.
«Yo me imagino que la ciudad lo que tiene que hacer es que cuando van a hacer una revisión no deben de avisar, caer de sorpresa porque ellos los ponen en sobreviso y si tienen algo lo van a sacar», dijo por su parte Sandra Romero .
La policía encontró en la guardería una herramienta que suelen utilizar los traficantes para empacar grandes cantidades de drogas, la investigación aún está abierta.
Como ya lo hemos escuchado, los padres de familia piden que cada vez que se abre un centro de cuidado de menores exijan medidas mucho más rigurosas.
