Nueva York
cnn
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Lluvia torrencial que afecta a la mayor parte de la ciudad de Nueva York está teniendo un efecto en los viajes aéreos en la zona.
La Administración Federal de Aviación ha emitió una parada en tierra para el aeropuerto LaGuardia de Nueva York, reteniendo vuelos debido a inundaciones y fuertes lluvias.
A las 12:30 p.m. ET, hay alrededor de 110 cancelaciones, o el 18% de su programación diaria, y 108 retrasos, lo que representa el 18% de su programación, según FlightAware.
Según la Autoridad Portuaria, los pasajeros de la Terminal A de LaGuardia, que actualmente está cerrada debido a inundaciones, están siendo transportados a la Terminal C más grande. Todos los vuelos de Spirit Airlines, que salen de la Terminal A, están cancelados hasta las 3 p.m. ET. Frontier Airlines operará sus dos vuelos restantes desde la Terminal C.
El resto del aeropuerto LaGuardia está abierto y operativo y todas las carreteras del aeropuerto han reabierto.
Mientras tanto, hay 124 retrasos en el aeropuerto JFK de Nueva York, pero no se ve tan afectado en comparación con LaGuardia. No ha habido impactos en el AirTrain, un servicio de tren que circula entre JFK y Jamaica, que es una estación importante en Long Island Rail Road.
La Autoridad Portuaria advierte que el personal del aeropuerto está vigilando pistas, calzadas y terminales y redirigirá el tráfico si es necesario. La agencia activará bombas de agua para aliviar las inundaciones si es necesario.
El viernes, la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, declaró el estado de emergencia en la ciudad de Nueva York, Long Island y el valle de Hudson debido a las lluvias extremas en toda la región.
Lluvias intensas a un ritmo de 1 a 2 pulgadas por hora caían en el área de los tres estados de Nueva York y se espera que continúen hasta el viernes por la noche.
El agua de las inundaciones que se derramó en el metro causó “importantes interrupciones” en el servicio en ocho líneas de tren en Brooklyn, anunció la Autoridad de Tránsito Metropolitano de Nueva York. El agua de la inundación desbordó las alcantarillas y las carreteras en Brooklyn y Hoboken, Nueva Jersey, lo que obligó a cierres, anunciaron las autoridades.
