29.5 C
Santo Domingo
jueves, diciembre 26, 2024

Desodorante o antitranspirante: ¿cuál es mejor para la salud?

Es una pregunta que muchos en algún momento nos hemos hecho. Crédito: Getty Images

Para una inmensa mayoría en el mundo occidental, la rutina diaria de higiene personal incluye

 el uso de desodorantes o antitranspirantes, con el fin de evitar los olores desagradables provocados por la transpiracion.

Si utilizas estos productos, es muy posible que hayas leído o escuchado que pueden ser perjudiciales para la salud, debido a la cantidad de aluminio que contienen y a que bloquean los poros.

Estos son productos mucho más costosos cuyo precio puede superar en 3 o 4 veces al de un desodorante o antitranspirante tradicional.

¿Pero vale la pena invertir en estos productos? ¿Son los otros realmente peligrosos para nuestra salud?

Greg Foot, periodista de la BBC, conversó con el dermatólogo Adil Sheraz y la Dra. Bárbara Olioso, química especializada en la composición de productos naturales, para desentrañar qué hay de ciencia detrás de estas afirmaciones y qué de márketing.

Millones de glándulas

“La sudoración es el mecanismo que regula la temperatura de nuestro cuerpo”, explica Sheraz.

“La transpiración libera fluidos, básicamente agua con electrolitos, sal. Cuando tu cuerpo se calienta, liberas este fluido en la superficie de tu piel, este se evapora por el aire, y así se lleva el calor, reduciendo la temperatura corporal”.

La transpiración es un mecanismo para regular la temperatura corporal. (Foto: Getty Images)

También, aclara, podemos sudar en situaciones que nos provocan estrés, nervios o ansiedad.

“Tenemos aproximadamente entre 2 y 4 millones de glándulas sudoríparas en el cuerpo. Unas son las llamadas glándulas sudoríparas ecrinas, que están presentes en casi todo el cuerpo, y liberan agua y sales, y no tienen ninguna clase de olor”, dice el dermatólogo.

Otras son las glándulas sudoríparas apocrinas, que cumplen una función levemente diferente y que están presentes en las axilas, en las ingles, el cuero cabelludo, y algunas zonas del rostro.

“Estas glándulas también producen sudor, pero su composición es un poco diferente: contiene ácidos grasos, carbohidratos, algunos lípidos complejos y esteroides. Cuando se libera este sudor, las bacterias que viven habitualmente en nuestra piel se alimentan de estos componentes y eso genera el olor que asocias con la transpiración”, dice Sheraz.

Impacto en la salud

Para evitar el mal olor podemos recurrir, en líneas generales, a 3 tipos de productos: desodorantes, antitranspirantes y desodorantes naturales.

Los antitranspirantes bloquean los poros y reducen la cantidad de transpiración. (Foto: Getty Images)

Los naturales, que se presentan como la opción más saludable, por lo general están hechos de una “mezcla de antibacterianos naturales (como extracto de salvia o derivados de zinc) con ingredientes que absorben el sudor (varios tipos de almidones) y bicarbonato de sodio”, explica Olioso.

A diferencia de estos últimos, los antitranspirantes – predominantemente a base de compuestos de aluminio– forman una cubierta temporal en los conductos del sudor y detienen su flujo hacia la superficie de la piel.

¿Puede resultar dañino bloquear los poros de las axilas? ¿Y tiene esto un efecto negativo en nuestra salud?

“Si pensamos en la cantidad de glándulas sudoríparas que tenemos, las de las axilas solo representan entre un 1% y un 2% del total. Por ello, bloquear esos poros con aluminio, no tendrá un efecto perjudicial en el sudor que produces”, explica Sheraz.

En cuanto al aluminio, si bien hay algunos estudios que en el pasado asociaron al aluminio con ciertas condiciones médicas como el cáncer de mama, o la demencia, dice Sheraz, “si miras todos estos estudios verás que no hay evidencia concluyente de que el aluminio provoque ninguna (de estas condiciones)”.

El aluminio fue desarrollado como antitranspirante a comienzos del siglo XX, es decir, su uso se remonta actualmente a más de cien años, con lo cual si tuviese algún efecto, como señalan dichos estudios, que Sheraz describe como controvertidos, ya se hubiese demostrado.

Forma correcta de usar antitranspirante

Lo que sí pueden causar es irritación en la piel de las axilas, por las otras sustancias químicas que contiene y esto, señala el dermatólogo, es por no usarlo correctamente.

¿Cuál es la forma adecuada?

Al final, es una cuestión de preferencias. (Foto: Getty Images)

La mejor manera de usar un producto que contiene aluminio es asegurarse que las axilas están completamente secas.

Si están húmedas, el cloruro de aluminio reaccionará con el agua y producirá ácido clorhídrico que irritará la piel.

Por esta razón, Sheraz recomienda aplicar el antitranspirante por la noche y, a la mañana siguiente, lavarse las axilas.

Con el tiempo, el aluminio se acumulará en los ductos y los bloquea. Así, aunque lo apliques por la noche, verás los resultados al día siguiente, porque tendrás menos transpiración.

Pero, aclara Sheraz, “esto se demora en hacer efecto en por lo menos una semana”.

“Es cuestión de tener una jerarquía de valores”, afirma la química Bárbara Olioso.

“Si para ti el desempeño y la protección a largo plazo es clave, elige un antitranspirante. Si tienes un estilo de consumidor más ‘verde’, y no te importa un desempeño más flojo y de menor duración, opta por uno natural”, dice, tomando en cuenta además que muchos vienen en envases recargables.

 

 

Related Articles

Ultimos Articulos