Teresa Racua Canales está alojada en este hotel desde septiembre del año pasado cuando buscó de asilo llegó de Perú con sus dos hijos.
“Un poquito nerviosa porque espero que un día me digan: ‘Mira Teresa hasta acá te vamos a ayudar y entonces voy a tener que verlas por mí misma’.”
Cuando NY1 Noticias la entrevistó el año pasado, su mayor deseo era poder encontrar un empleo fijo, para alquilar su propio espacio. Algo que no ha podido lograr.
“Porque yo trabajo cuatro veces a la semana ya veces tres. Y entonces, imagínate no me alcanza para un alquiler. En cambio acá por lo menos tengo leche, fruta, una comida.”
Al igual que esta madre, actualmente hay unos 45 mil inmigrantes en busca de asilo bajo el cuidado de la ciudad, de los más de 70 mil que han pasado por el sistema de albergues desde el año pasado.
Solo la semana anterior se sumaron 2.200 nuevos inmigrantes, según funcionarios municipales.
Anne Williams-Isom, Vicealcalde de Salud y Servicios Humanos NYC explica:
“La ciudad continúa haciendo todo lo necesario para apoyar a los solicitantes de asilo, pero hemos llegado a un punto en el que el sistema se está desmoronando y queremos asegurarnos de que estamos haciendo todo lo posible para proporcionar la calidad de atención que queremos.”
En general, agregó que en estos momentos hay alrededor de 95,000 personas bajo el cuidado de la ciudad.
La alcaldía estimó, la semana pasada, que desde el inicio de esta crisis hasta julio del próximo año, se gastarán un total de 4.3 mil millones de dólares en albergue. Esto se traduce en unos 380 dólares al día, por persona.
Activistas que abogan por los derechos de los inmigrantes dicen que para abordar este problema, la ciudad necesita el apoyo del gobierno estatal y federal.
Así lo explica Murad Awawdeh, director ejecutivo de la coalición de inmigrantes de Nueva York:
“No deberíamos mantener a las personas en refugios de emergencia más tiempo del necesario y eso es lo que estamos viendo. Sobre todo con las familias. Terminan estando en un sistema de refugio durante al menos casi dos años o más”.
Mientras tanto estos ejecutivos municipales anunciaron este miércoles que la Correccional estatal Lincoln, en Harlem, que cerró en 2019 comenzará a albergar temporalmente a inmigrantes recién llegados en esta misma semana.
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