Nota del editor: Dashawn Austin y Akeem Artis fueron sentenciados el miércoles después de haber sido declarados culpables en abril de 2024 por los cargos de la muerte a tiros de Davell Gardner, de 1 año, y por otros cargos, según un comunicado de la Fiscalía del Distrito de Brooklyn. Austin fue declarado culpable de asesinato en segundo grado y Artis fue declarado culpable de homicidio en primer grado por la muerte del niño. Austin fue sentenciado a entre 50 años y cadena perpetua y Artis fue sentenciado a 40 años, según el comunicado.
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Dos hombres fueron acusados el jueves en relación con La muerte a tiros de un niño de 1 año. en la ciudad de Nueva York el año pasado, según un comunicado de prensa de la Oficina del Fiscal del Distrito de Brooklyn.
El bebé, identificado como Davell Gardner, fue asesinado en julio pasado en la acera frente al parque infantil Raymond Bush de Brooklyn.
Menos de un año después de ese tiroteo, Dashawn Austin, de 25 años, y Akeem Artis, de 24, fueron arrestados y acusados en relación con el tiroteo y la muerte de Davell. Ambos hombres son miembros de una pandilla callejera local llamada Hoolies y la violencia fue motivada por la rivalidad entre pandillas y las represalias, según la oficina del fiscal de distrito de Brooklyn, Eric González.
Artis era el conductor de un automóvil del que Austin y un segundo tirador, cuyo nombre no fue identificado, salieron y luego supuestamente dispararon contra una multitud que asistía a una comida al aire libre el 12 de julio de 2020, según la acusación. Cuatro personas recibieron disparos, incluido el bebé. Las otras víctimas, todas transeúntes inocentes, sobrevivieron.
Los hombres también son dos de los 18 acusados en una acusación formal de 63 cargos por actividad relacionada con pandillas, incluidos múltiples cargos de asesinato y cargos por posesión de armas.
CNN está trabajando para confirmar la representación legal de los sospechosos.
Entre mayo de 2018 y septiembre de 2020, miembros de la pandilla Hoolies están acusados de cometer cuatro asesinatos y ocho tiroteos no fatales que involucraron a nueve víctimas, según un nuevo comunicado de la oficina de González. Siete de las 13 víctimas eran personas inocentes que no eran rivales de la pandilla, según el comunicado.
“La insidiosa violencia de pandillas, como alegamos en este caso, ha cobrado y traumatizado demasiadas vidas, incluidos muchos inocentes como Davell Gardner, un bebé brillante y amado con toda su vida por delante”, dijo González.
El comisionado de policía de la ciudad de Nueva York, Dermot Shea, dice que los presuntos pandilleros estaban dispuestos a matar “sin tener en cuenta a las personas inocentes atrapadas en el fuego cruzado”.
“Esta violencia tiene que cesar y casos como estos sólo se vuelven más sólidos cuando los detectives del Departamento de Policía de Nueva York y los fiscales adjuntos trabajan mano a mano para construirlos desde el principio”, dijo Shea.
