cnn
—
A un enorme árbol de higuera carbonizado por los incendios forestales en Maui le están brotando nuevas hojas verdes, lo que da esperanza de que no todo se haya perdido por completo en las llamas.
Este hito cultural de 150 años domina la plaza del juzgado en la famosa Front Street de Lahaina.
El árbol fue plantado en 1873 y es el más grande de su tipo en los EE. UU., con una altura de más de 60 pies.
Este árbol histórico, que forma parte de la familia de las higueras, da la ilusión de ser varios árboles debido a su capacidad de desarrollar troncos accesorios desde sus raíces, lo que le permite extenderse. Actualmente cuenta con alrededor de 46 troncales principales.
Comúnmente se lo conoce como un lugar de reunión para los residentes de Lahaina, y sirve como centro para turistas, festivales e incluso propuestas de bodas.
El propietario de una empresa de paisajismo, Chris Imonti, dijo que el baniano ha sido una figura icónica en Lahaina durante más de un siglo, y ver crecer las hojas significa mucho para la comunidad.
«La gente lo ve como una señal de esperanza», dijo Imonti. «Una señal de nuevos comienzos».
Imonti ha estado trabajando con el arbolista estatal de Hawái, Steve Nimz, junto con un equipo de voluntarios para ayudar a preservar el árbol de Banyan.
«Yo diría que alrededor del 75% del árbol en este momento está mostrando un nuevo crecimiento, y estamos muy contentos por eso», dijo Imonti.
«La esquina noreste del árbol recibió la mayor parte del calor, por lo que todavía estamos monitoreando esa parte del árbol muy de cerca», señaló.
Durante el incendio, el suelo se calentó mucho, lo que alteró la capacidad del suelo para absorber agua, según el paisajista.
Los voluntarios y contratistas locales han estado vertiendo más de 5.000 galones de agua sobre el árbol diariamente, en un intento de rehidratar las raíces.
Y el té de abono, un nutriente líquido orgánico para abono, ayuda a que el agua penetre en la tierra quemada.
«Lo aplicamos al suelo para estimular el crecimiento de las raíces y crear una estructura de suelo muy estable», dijo Imonti.
Los incendios forestales destruyeron la mayor parte de Lahaina, dejando a una comunidad de más de 13.000 personas con poco o nada que salvar. Las llamas quemaron casas y negocios y desplazaron a más de la mitad de los residentes de Lahaina.
«Ahora, cuando miras a tu alrededor, no encuentras ningún punto de referencia», dijo Imonti a CNN. «El árbol es como tu única brújula en la ciudad».
El baniano no es el único árbol que los voluntarios locales están trabajando para salvar.
«También nos ocupamos de muchos otros árboles históricos en Lahaina», añadió Imonti.
Uno de ellos es el árbol Kumu ‘ulu, que está relacionado con la leyenda de Ku, el dios hawaiano de la agricultura y la pesca, que se transformó en un árbol Kumu ‘ulu para alimentar a su familia durante una hambruna. El árbol produce el fruto del pan, ‘ulu, un nutriente popular en la isla.
«Pero la mayoría de ellos han quedado bastante carbonizados», señaló Imonti. “Quiero decir, todo se ha ido”, continuó. «Estamos corriendo regando algunos árboles en la ciudad y eso es todo lo que queda».
Mientras tanto, los residentes están regresando a los terrenos quemados donde alguna vez estuvieron sus casas.
«Todo el mundo realmente tiene que reconstruir sus vidas», dijo Imonti, lo que viene acompañado de «una ola completamente distinta de tristeza para las familias».
Y si bien preservar los árboles es importante para la cultura y la tranquilidad de la isla, Imonti reconoció que no es una prioridad para muchos lugareños en este momento.
«Creo que el árbol es lo último en lo que mucha gente piensa ahora», admitió el paisajista.
Pero espera que el árbol “pueda ser un buen vehículo para el cambio” y siga siendo un signo de esperanza para el largo camino de recuperación que le espera a Lahaina.
La ciudad «tiene que ser rediseñada y llevará años», dijo Imonti a CNN. «Danos tiempo para sanar y, con suerte, este árbol volverá a la vida y podremos comenzar a avanzar de manera positiva».
