Crear un plan de emprendimiento femenino, incentivar el autoempleo o proporcionar más ayudas a los emprendedores jóvenes. Estas son solo algunas de las propuestas que ha elaborado UATAE y que recogen las demandas de los trabajadores autónomos de cara a las elecciones generales.
A nivel de participación y representación, se propone la implementación de un proceso democrático que permita a cada trabajador y trabajadora autónoma expresar su voluntad directa a través de medios presenciales y telemáticos. El objetivo de este proceso es garantizar una mayor participación y representatividad en las decisiones que sucedan al colectivo de autónomos.
En el marco de impulsar la igualdad de género y promover la participación activa de las mujeres en el trabajo autónomo, se han propuesto una serie de medidas en un plan de emprendimiento femenino. Una de las medidas clave contempla la constitución de un órgano consultivo y paritario dentro del Consejo del Trabajo Autónomo. Para brindar un apoyo financiero adecuado, se plantea la implementación de microcréditos específicos para actividades lideradas por mujeres y avales públicos que facilitan la obtención de crédito. Y en términos de conciliación, se propone establecer deducciones fiscales para los gastos derivados del cuidado de hijos, familiares o personas dependientes en actividades que dificulten la conciliación familiar.
Ayudas directas a los jovenes emprendedores
Con el objetivo de fomentar el emprendimiento entre los jóvenes y brindarles el apoyo necesario para iniciar sus actividades empresariales, se han planteado la implementación de ayudas directas a las personas jóvenes que deciden emprender. Además, se contempla la aplicación de bonificaciones fiscales durante los tres primeros años de actividad. Para facilitar la obtención de créditos, se propone la implementación de avales públicos que respaldan las solicitudes de financiamiento de los emprendedores jóvenes.
Para ayudar a los autónomos vulnerables se plantea la implementación de ayudas directas dirigidas a aquellos sectores que experimentan una mayor incidencia de la inflamación, como el pequeño comercio y el transporte. Asimismo, se plantea crear la figura del autónomo vulnerable, que podrá acceder a bonos sociales térmicos y eléctricos. Estos bonos reforzarán ayudas específicas para hacer frente a los gastos relacionados con la energía, garantizando así un nivel básico de confort y bienestar en sus hogares.
En protección social quieren impulsar una cotización por ingresos reales, de manera que todas las personas afiliadas al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) coticen proporcionalmente a sus rendimientos netos. Mientras que en fiscalidad justa quieren dotar de una mayor objetivación para justificar los gastos que generen más dificultad para su deducción.
