Dejando de lado ese argumento, ciertamente hay algunas oportunidades diplomáticas que Trump puede aprovechar, aunque la historia y las siniestras advertencias recientes sugieren que puede ablandar a sus adversarios y aliados con amenazas de acción militar si no obtiene lo que quiere. (Ver: Irán, Groenlandia, Panamá.)
Aquí hay un cuadro de mando que debe tener a mano durante los primeros meses.
En la niebla de la guerra, un posible acuerdo con Ucrania
Hay muy poca evidencia de que Putin esté ansioso por llegar a un acuerdo que lo saque de una guerra que ya le ha costado a Rusia casi 200.000 muertos y más de medio millón de heridos. Pero se supone que debe estar buscando una salida. Desde su debate televisado con la vicepresidenta Kamala Harris, Trump ha estado prometiendo precisamente eso: un acuerdo “en 24 horas” o incluso uno completado antes de prestar juramento.
Ahora, como era de esperar, parece un poco más complicado. Su enviado especial para Ucrania, Keith Kellogg, un general retirado de 80 años que formó parte del primer Consejo de Seguridad Nacional de Trump, dijo recientemente a Fox «fijémoslo en 100 días» para asegurarnos de que una «solución sea sólida y sostenible». , y que esta guerra termine para que podamos detener la matanza”. Trump ha dicho que se reunirá con Putin “pronto”, un momento notable, particularmente porque Biden no ha hablado con el líder ruso en casi tres años.
¿Cómo sería un acuerdo? Primero, la mayoría de los funcionarios de Biden y Trump reconocen, al menos en privado, que Rusia probablemente mantendría sus fuerzas en aproximadamente el 20 por ciento de Ucrania que ahora ocupa, como parte de un armisticio similar al que detuvo, pero no terminó, la Guerra de Corea en 1953. La parte más difícil de cualquier acuerdo es el acuerdo de seguridad. ¿Quién garantizaría que Putin no aprovecharía el cese de los combates para rearmarse, reclutar y entrenar nuevas fuerzas, aprender de los errores de los últimos tres años y volver a invadir?
Jake Sullivan, asesor de seguridad nacional de Biden, sostiene que el equipo de Biden pasó el año pasado “estableciendo la arquitectura” para brindar esa seguridad. Pero Volodymyr Zelensky, el presidente de Ucrania, sospecha que todo son palabras. Al recordar que nadie prestó mucha atención al acuerdo de seguridad de 1994 que Ucrania firmó con Estados Unidos, Gran Bretaña y Rusia, entre otros, dice que sólo la membresía en la OTAN impedirá que Putin vuelva a atacar.