WASHINGTON — Darren Baker pasó gran parte de su infancia rodeado de béisbol. El domingo fue la primera vez que se despertó sabiendo que era un jugador de las Grandes Ligas.
El segunda base, hijo del dos veces All-Star y veterano manager Dusty Baker, fue una de las incorporaciones al roster de los Nacionales de Washington cuando fue seleccionado su contrato de Triple-A Rochester el domingo.
«No necesitaba ninguna alarma hoy», dijo Darren Baker, quien se enteró de su convocatoria el sábado.
Baker hizo su debut en las Grandes Ligas como bateador emergente para los Nacionales en la novena entrada de una derrota por 14-1 ante los Cachorros de ChicagoConectó sencillo al centro en el primer lanzamiento que vio.
Las primeras dos llamadas de Baker fueron a sus padres, quienes llegaron a Washington desde la Costa Oeste temprano en la mañana del domingo y llegaron a tiempo para el final de la serie de los Nacionales contra los Cachorros de Chicago.
El jugador de 25 años, seleccionado en la décima ronda del draft de Washington en 2021, bateó .285 con 49 carreras impulsadas y 38 bases robadas en Rochester, y podría jugar algunos jardines además durante su tiempo en Washington.
«Fue criado como jugador de béisbol», dijo el mánager de Washington, Dave Martínez. «Entiende el juego y sabe cómo jugarlo. Roba bases cuando es necesario. Pone la pelota en juego para que los jugadores se pongan en ventaja y produce carreras importantes. Todo eso. Es simplemente un jugador de béisbol».
Darren Baker estuvo involucrado en una jugada memorable durante el Juego 5 de la Serie Mundial de 2002 cuando, cuando tenía 3 años y su padre era manager en San Francisco, fue barrido fuera de peligro por JT Snow en medio de una jugada.
«Es algo que él ni siquiera recuerda», dijo Dusty Baker. «Se lo recuerdan constantemente, pero no lo recuerda. Es una historia muy interesante. En ese momento, parecía algo gracioso o vergonzoso o lo que sea, pero en el ciclo completo de la vida, tal vez se suponía que debía suceder».
Una de las paradas de Dusty Baker como manager fue en Washington en 2016 y 2017, y Darren Baker pasó tiempo en esos veranos en los Nacionales. El joven Baker dijo el domingo que se sentía cómodo en el vestuario, particularmente en el de Washington, ya que sabía exactamente cómo llegar allí.
Esa es sólo una faceta de una vida de béisbol ya rica que Baker construirá a medida que comience su carrera en las Grandes Ligas.
«He tenido muchas experiencias y me he cruzado con muchas personas diferentes para llegar a este punto, y todavía estoy empezando», dijo Baker. «Veremos a dónde nos lleva, pero estoy agradecido por ello».
