A pesar del calor, con sonrisas, mochilas llenas de útiles escolares y rezos, 30.000 estudiantes de escuelas católicas regresaron a las aulas en Brooklyn y Queens.
«Este es un día muy emocionante cuando los niños regresan. Nosotros estamos acostumbrados al ruido de los niños jugando y ellos están felices de ver a sus amigos y sus maestros», dijo Edwin Ortiz, vicario parroquial, Iglesia de St. Athanasius.
El obispo del condado dio la bienvenida a cientos de estudiantes del primero al octavo grado en la Academia St. Athanasius en Bensonhurst, a donde asisten los tres hijos de Darwin Lema.
«Me siento contento porque ya regresan a clases. El niño estaba en la casa, así que muy bien», dijo Lema.
Lema.
Este ciclo escolar está marcado por el cierre de doce escuelas en Manhattan, El Bronx y Staten Island que dependen de la Arquidiócesis de Nueva York. Otros padres latinos ven ventajas en la educación católica.
Benavides.
«Escogí la escuela católica desde que mi hija estudió aquí porque me parece que es mucho mejor la enseñanza», dijo Daniela Benavides. «Soy católica y eso para mí es muy importante y también porque hay menos alumnos y al haber menos alumnos me parece que pueden aprender más que en la pública».
La diócesis de Brooklyn alberga 69 escuelas primarias católicas y 15 escuelas secundarias en el condado y en Queens.