Ubicado en El Barrio, East Harlem el Centro de Enriquecimiento Familiar, East Side, SOUL, hace poco abrió sus puertas para ofrecer un sin fin de recursos gratuitos para la comunidad.
Una joven embarazada vino hasta aqui para recibir la guia de una doulaque ofrece el centro y así sentirse acompañado durante esta etapa de su vida.
María Isabel Núñez, participante del centro dice:
“Y usé un poco más de información de cómo poder darle el seno efectivamente a mi bebé, qué puedo hacer para guardar la leche, cómo soportar ese proceso que voy a tener.”
En completa colaboración con la comunidad, el centro se esfuerza por cambiar la vida de niños, jóvenes y familias que están superando algunos de los retos y obstáculos más difíciles de la vida, dice la directora del programa, Jocelyn Cáceres:
“Ellos tienen la oportunidad de convivir con vecinos, relajarse y también participar de diferentes actividades y entrenamientos”, otros apuntan.
El proporcionar cuenta con diferentes salas, una de juegos para los más pequeños, una oficina para trabajar, cocina, computadora y hasta un armario para que las familias tomen la ropa que necesiten, todo creado y diseñado por miembros de la comunidad.
“Fue creado con la intención de empedrar a la comunidad, de tomar decisiones sobre que programas se van a crear aquí”, añade Cáceres.
Vivían Márquez, vive en la zona y dice haber llegado en busca de ayuda de vivienda, pero ahora, durante sus tiempos libres, colabora en lo necesario para el centro.
Vivian Márquez, del Comité Asesor de Padres añade: “Para mí es como si fuera un santuario, un santuario donde tú vienes, tiene lugar donde relajarte, sentarte, estar como en tu casa.”
Y aunque el equipo es pequeño, dicen a diario, se esfuerzan para que cada familia encuentre la ayuda que buscan.
Como Elizabeth Amadiz, defensora familiar quien explica:
“Es específicamente a lo que la familia viene y necesita, buscamos por ejemplo, si la familia tiene una necesidad relacionada con la educación, buscamos las personas que trabajan en el sistema escolar para que luego ayuden y lo apoyen en la manera necesaria.”
Todos están bienvenidos al centro ubicado en el 71 de la calle 111th Este entre Madison y Park Avenue, te atienden en español, y se respeta la confidencialidad.
Jenice Zayas, enlace comunitario dice:
“Queremos que todo el mundo sepa que aquí pueden venir, no le vamos a preguntar información, no necesitamos documentos, aquí nunca se le va a pedir dinero, ni identificación, este en su lugar donde simplemente vas a estar seguro.”
En los próximos 3 años, la iniciativa espera expandirse en 30 centros como este, en diferentes partes de la ciudad.