Es una jornada muy movida en Casa Enrique.
En la cocina, el chef Cosme Aguilar prepara algunos de esos platillos tradicionales de su juventud en el sureño estado mexicano de Chiapas.
«Yo llegué como todo el mundo viene acá, con el sueño americano de poder triunfar en Estados Unidos y regresar a nuestro país», dijo Aguilar.
Pero Aguilar terminó quedándose en Nueva York.
Sus primeros pasos en el mundo culinario comenzaron en un restaurante francés, primero limpiando la cocina y los baños y con el paso del tiempo trabajando más de cerca con el chef. Fue ahí donde empezó a enamorarse de esta profesión.
En 2012 abrió, junto con varios socios, el ya emblemático local en Queens y tres años después con platillos populares como Cochinito Chiapaneco y Albóndigas en Chipotle ganó una estrella Michelin, el primer restaurante latino en la ciudad en recibir esta importante distinción.
«Es un premio que se da a un chef y no es fácil de obtenerlo. Nunca pensé llegar a ese nivel… el día que me dijeron eso mi vida cambió completamente», agregó Aguilar.
Aguilar ha visto de primera mano los enormes cambios en la comunidad mexicana en estos últimos 20 años.
«Ibas a restaurantes y te encontré chimichangas y burritos que no eran restaurantes auténticos mexicanos», dijo Aguilar.
En vecindarios como East Harlem, Sunset Park y Jackson Heights, esos cambios son evidentes y los números confirman lo que se puede ver en una vista simple. Más negocios mexicanos y una mayor presencia de esta comunidad en el día a día de la ciudad.
De acuerdo al Instituto de Estudios Mexicanos de CUNY, poco más de 180 mil mexicanos vivían en los cinco condados en 2000. Esa cifra se disparó a 324 mil en 2021.
Y Staten Island es el condado con la mayor tasa de crecimiento. Cerca de 20 mil mexicanos viven ahí, un salto de 183 por ciento durante este período
Es precisamente en Staten Island donde muchos inmigrantes mexicanos pero también de otras partes de América Latina recibieron asesoramiento, ayuda y las herramientas necesarias para convertirse en futuros líderes gracias al trabajo de una de las organizaciones comunitarias más importantes en la ciudad.
Si uno camina en Port Richmond, si uno camina en Stapleton, son negocios mexicanos, incluso muchas de las organizaciones latinas son manejadas por mujeres mexicanas.
Yesenia Mata es la directora ejecutiva de La Colmena, un grupo que se enfoca en los derechos de los trabajadores inmigrantes, incluidos los jornaleros.
«Hemos visto que cuando uno está empoderado lucha y hay cambios y por eso hemos visto como aquí en Staten Island la comunidad inmigrante, la comunidad mexicana, sigue creciendo, está empoderada y están creando muchos cambios», dijo Mata.
Para activistas como Mata, el siguiente paso en este proceso es una mayor representación política a nivel local y estatal, algo que dice vendrá con los jóvenes.
Estos sonidos y ritmos se están volviendo cada vez más comunes, incluso en lugares como el Met.
Cuando comenzamos con el mariachi, no había mucho movimiento, no había mucha escena en lo que es el mariachi, dos o tres músicos se vestían de charro y eso era lo que la gente conocía como mariachi.
El Mariachi Real de México nació en 1991 y ahora es considerado una institución cultural en Nueva York. Su director, Ramón Ponce viene de una familia musical siguiendo los pasos de su padre y sus abuelos.
«Cuando me pongo el traje de charro me pongo la bandera de México pero también estoy representando a toda mi gente latina, toda mi raza. El gusto por la música no solamente es para nostros los mexicanos, el gusto de la música mariachi es para todos”, explicó Ponce.
Una música emblemática y tan representativa de una comunidad que ha dicho presente en estos últimos 20 años.