Protestas masivas estallaron en Israel el domingo por la noche cuando miles de personas salieron a las calles en Tel Aviv y Jerusalén en medio de un empeoramiento de la crisis política en el país.
Los israelíes salieron a las calles después de que el primer ministro Benjamin Netanyahu despidiera a su ministro de defensa por su oposición a una reforma judicial planificada.
Ondeando banderas israelíes y cantando «democratia», se podía ver a los manifestantes bloqueando calles y puentes, incluida la autopista principal de Ayalon.
Los manifestantes encendieron varios fuegos en la carretera principal de Tel Aviv, y su humo negro y acre se elevó hacia el cielo, oscureciendo en parte algunos de los rascacielos icónicos de la ciudad. Los manifestantes también se reunieron al lado de la carretera, quemando chatarra y madera casi sin policía alrededor.
Las protestas se habían reducido alrededor de las 2 a.m. hora local del lunes en Tel Aviv. El equipo de CNN en el terreno vio alrededor de media docena de autos de policía que se dirigían a toda velocidad hacia donde estaban los manifestantes y las imágenes en vivo de la escena mostraban a las fuerzas de seguridad disparando cañones de agua contra los manifestantes que aún estaban reunidos.
Un portavoz de la policía en la ciudad le dijo a CNN que la policía se estaba preparando para dispersar a los manifestantes de Ayalon en dirección sur cerca del cruce de Hashalom y pidió a los manifestantes que abandonaran el área y evacuaran la carretera.
