El aumento del uso de las bicicletas eléctricas y otros dispositivos motorizados ha llevado a que estas invadan áreas peatonales, aumente la preocupación entre los residentes del Alto Manhattan como Robert Flyer, que cuenta con una discapacidad.
“Yo cuando veo un scooter, una motoneta o una bicicleta que se va a subir por la acera, porque yo ando por la acera, inmediatamente me quedo tranquilo, porque se suben a la acera sin pensar, que puede venir un niño, sin pensar que pueden golpear a un adulto”, dijo Flyer, vecino de Washington Heights.
Estos vehículos altamente mecanizados, que pasan a toda velocidad por semáforos en rojo y cruces peatonales, incluidas las aceras, se han descontrolado, según los residentes de la zona.
“No la acera es de ellos, no es de los peatones, es de los pasoleros”, dijo Diógenes Almonte, de Washington Heights.,
Es importante destacar que aunque las bicicletas eléctricas y los scooters utilizan un motor, no es necesario registrarlos.
Mientras que aquellos que cuentan con un número de identificación, conocidos como ciclomotor, es necesario su registro y contar con una licencia de conducir.
El aumento de estos vehículos de micromovilidad es en parte porque hoy en día sirven como medio de trabajo, especialmente para los repartidores de comida.
“Bueno, yo uso mi motocicleta de acuerdo a como manda la ley y todo”, aseguró Javier Sánchez, repartidor. “Respeto la luz en rojo y todo, tengo hasta mis placas y todo, perfectamente, no me la paso montado en la acera como dice la comunidad ni nada. Estamos de acuerdo con la ley, usamos casco, tengo mi casco, todo mis guantes, todo».
Aunque él está consciente de que no todos siguen las leyes.
“Algunos, traen la mentalidad de sus países ¿si me entiende? Que quieren manejar como ellos quieren».
La situación se ha vuelto un caos para las comunidades, ya que sus regulaciones son estatales pese a que los oficiales electos aseguran estar interviniendo en lo que pueden.
“Yo trabajo muy de cerca, como por ejemplo con los Deliveristas Unidos, y algunos grupos de educación y que abogan por los derechos de los trabajadores, para asegurar que si se entiendan la manera que podemos usar mejor las calles y compartirlas”, dijo la concejal Carmen De La Rosa. «Pero si estoy de acuerdo que más tiene que suceder porque está causando un caos y tenemos que velar por los intereses de los más vulnerables».
Según cifras del departamento de la Policía, en el primer trimestre de 2023, se emitieron 975 citaciones penales y civiles por circular en bicicleta por la acera.
Esta cifra contrasta con las 47 citas del mismo periodo del año pasado y con las solo siete de 2021.
Los residentes aseguran que la falta de aplicación de las leyes y reglamentaciones existentes que ya están en vigor y no se hacen cumplir, ponen sus vidas en peligro.
