Un poco menos de tres años del muerte de tyler skaggs, ha iniciado el proceso legal en contra de eric kay, exdirector de comunicaciones de los Angels y principal culpable del deceso del pelotero, y el otrora ejecutivo de Los Angeles podría tener más problemas de los previstos.
de acuerdo con AP, cuatro expeloteros de los Angeles reconocieron consumo de sustancias ilegales durante su estancia en Anaheim y señaló a Kay como el responsable de suplirlos de las drogas.
Los peloteros que testificaron en contra de Kay son los lanzadores Matt Harvey, Mike Morin, Cam Bedrosian y el primera base CJ Cron. De los jugadores involucrados, solo Cron se mantiene en un roster de Grandes Ligas.
Morín y Cron reconocieron que durante un largo periodo consumieron oxicodona y Kay les entregaba la sustancia. Por su parte, Bedrosian destacó que solo consumió en una ocasión y volvió el resto de las píldoras que no usó al no sentirse bien con el efecto de la droga.
TE PUEDE INTERESAR: Tyler Skaggs, con alcohol y droga en su cuerpo, revela autopsia
Skaggs fue encontrado sin vida el 1 de julio de 2019 en un hotel de Dallas durante una visita de los Angels a los Rangers. Una autopsia reveló que el serpentinero de 27 años murió ahogado en su propio vómito después de consumir alcohol, oxicodona y fentanilo.
Al respecto, Kay reconoció haber suministrado a Skaggs de los opioides. Agregó que el día del deceso vio al lanzador inhalar sustancias.
Matt Harvey, en la cuerda floja
Previo a la declaración de Harvey en el caso, la defensa de Kay dijo que el veterano de 32 años era uno de los principales suministradores de drogas de Skaggs. Se agregó que la noche previa al deceso del serpentinero, este reveló que Harvey le entregó Percocet, un analgésico que contiene oxicodona.
Al momento de las sospechas, harvey no se defendió. Posteriormente explicó que no declararía sin recibir inmunidad y en su comparecencia ante la corte reconoció haber consumido cocaína previo y durante su paso por los Angels, además de confirmar las presunciones de los abogados de Kay. También dijo que evitó hablar públicamente por miedo a arriesgar su carrera.