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viernes, marzo 29, 2024

El jardín de Nemo: el futuro de la agricultura podría estar bajo el mar




CNN

Cuando piensa en la próxima frontera para el cultivo de alimentos, puede pensar en planes lejanos para cultivar en Marte.

Pero una familia italiana en el negocio de equipos de buceo cree que la próxima extensión cultivable sin explotar está aquí en la Tierra: el mar.

Nemo’s Garden es el primer sistema de cultivo submarino de plantas terrestres del mundo. Ubicada frente a la costa de Noli, Italia, al suroeste de Génova, la granja consiste en una serie de invernaderos suspendidos, transparentes y en forma de cúpula llamados biosferas, anclados al fondo del mar.

“La misión de esta tecnología es cambiar la agricultura, darle una posibilidad adicional de cultivar productos en la gran cantidad de costas de la Tierra, siendo sostenible y sin afectar el medio ambiente”, le dice a CNN el cofundador Luca Gamberini.

A su padre y fundador de la empresa de equipos submarinos Ocean Reef Group, Sergio Gamberini, se le ocurrió la idea al combinar sus dos pasiones: el buceo y la jardinería. En 2012, el proyecto comenzó plantando albahaca en un globo bajo el agua. Diez años después, Nemo’s Garden está creciendo con fuerza.

Este jardín submarino está cultivando la comida del futuro

Dado que se espera que la población mundial alcance aproximadamente los 10 000 millones para 2050, la ONU estima que la producción de alimentos deberá aumentar hasta en un 60 % para satisfacer esta demanda.

“Tenemos una cantidad finita de recursos, y nuestra forma (actual) de cosechar esos recursos es insostenible”, dice Gamberini, “y creemos que bajo el agua nos da algunas ventajas (sobre) la agricultura tradicional”.

Flotando de seis a 10 metros bajo el agua, las plantas en Nemo’s Garden están separadas de cualquier patógeno y plagas externas, al mismo tiempo que tienen acceso al agua dulce que se produce como resultado de la condensación desalinizada dentro de las biosferas, dice Gamberini. Además, señala, la temperatura relativamente estable del agua de mar es un entorno ideal para la vida vegetal.

Nemo’s Garden usa hidroponía, una técnica que usa nutrientes a base de agua en lugar de suelo, el mismo método que se usa en la mayoría de las granjas verticales de interior. La luz del sol llega a las plantas, pero se usan luces de crecimiento suplementarias cuando es necesario.

Nemo's Garden, en la foto, es una idea novedosa para ayudar a alimentar a una población en crecimiento.

Todo se monitorea en tierra a través de cámaras y sensores, y la configuración se puede ajustar de forma remota desde cualquier parte del mundo, dice Gamberini. Cuando llegue el momento de la cosecha, un buzo cortará la vegetación, la colocará en bolsas y la hará flotar hasta la superficie.

Dado que las biosferas tienen solo unos dos metros de diámetro, no pueden producir cultivos más grandes como el maíz o el trigo. Pero pueden caber entre 70 y 100 plantas más pequeñas, dice Gamberini. «Probamos cientos de plantas diferentes, desde fresas hasta tomates, frijoles y, por supuesto, hierbas», agrega.

Se han realizado estudios que van desde la naturaleza farmacéutica hasta la culinaria en Nemo’s Garden. A estudio 2020 de la Università di Pisa concluyó que la albahaca del jardín tenía una mayor concentración de aceite esencial y contenía más antioxidantes.

En cuanto a su huella física, Gamberini dice que la granja acuática atrae la vida marina, en lugar de perturbarla. “En nuestros estudios, Nemo’s Garden tiene un 58 % más de peces que el entorno que lo rodea, por lo que tiene un efecto de repoblación”, añade.

Gamberini dice que el proyecto piloto no ha estado exento de desafíos, en particular, eventos climáticos inevitables. En 2019, una poderosa tormenta rompió algunas de las biosferas.

“No exploramos una ubicación que fuera perfecta en términos de sol y estaciones, y la exposición a fuertes tormentas”, dice sobre el sitio de Noli, que fue elegido debido a su proximidad a la casa de vacaciones de su familia.

El equipo dentro de Nemo's Garden funciona con energía renovable, como paneles solares y turbinas eólicas.

Más allá de los desastres naturales, crear algo desde cero, nada menos que en un entorno hostil, no ha sido fácil, le dice a CNN, pero ha sido emocionante.

Otras empresas de todo el mundo también están explorando los beneficios del mar para la agricultura. GreenWave, una organización sin fines de lucro en América del Norte, es cultivo de algas y mariscos en un andamio submarino. La empresa Sea6 Energy, con sede en Bangalore, ha creado un tractor mecanizado que puede plantar y cosechar algas en el fondo del océano.

El equipo de Nemo’s Garden tiene planes para biósferas aún más grandes en el futuro, así como en otros lugares. Para probar la viabilidad en diferentes entornos, este año planean instalar una versión a pequeña escala en una cantera de agua fría en el estado estadounidense de Ohio.

“Creo que la mayoría de la tecnología se puede adaptar a casi todos los entornos”, dice Gamberini, pero cree que el futuro de Nemo’s Garden estará principalmente a lo largo de las costas donde las comunidades podrían beneficiarse del espacio adicional que ofrece.

“La agricultura submarina no (va a) responder al problema de ‘cómo vamos a alimentar a todo el mundo’”, dice Gamberini, “pero espero que se convierta en un estándar en las regiones que lo necesitan”.



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