El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró este viernes con un sólido ascenso del 1.17 % hasta los 69.62 dólares, en una jornada influenciada por las perspectivas de una recuperación de la demanda del crudo a nivel mundial.
Al final de las operaciones en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros del WTI para entrega en julio sumaron 81 centavos de dólar respecto al cierre de la sesión anterior.
El crudo de referencia estadounidense se quedó así a las puertas de superar la barrera psicológica de los 70 dólares el barril, tras subir casi un 4 % a lo largo de la semana.
El mercado recibió el impulso de la reciente decisión de la OPEP+ de mantener su aumento gradual de producción, pese al potencial retorno del crudo iraní, así como de las buenas perspectivas de demanda para el verano en Estados Unidos y Europa.
«Pero no es solo la demanda veraniega, también es el progreso en las campañas de vacunación y fuertes impulsos de los gobiernos para convencer a la gente de que se inoculen» la vacuna contra el COVID-19, opinó la analista Louise Dickson, de Rystad Energy.
El Texas está avanzando también debido a los posibles escollos en las negociaciones para restablecer el pacto nuclear de 2015 con Irán, lo que reduce las expectativas de que se levanten pronto las sanciones contra ese país y, por consiguiente, vuelva el crudo iraní al mercado.
Además, los inversores se vieron animados por las cifras de empleo de Estados Unidos publicadas este viernes, que indican que la economía estadounidense generó 559,000 puestos de trabajo, más del doble que el mes anterior y uno de los datos de creación de empleo más altos desde agosto del año pasado.
Por su parte, los contratos de gasolina con vencimiento en julio ascendieron cerca de 1 centavo hasta los 2.21 dólares el galón, mientras que los de gas natural, para entrega el mismo mes, sumaron 6 centavos hasta los 3.09 dólares por cada 1,000 pies cúbicos.
