Un testamento empresarial, también conocido como testamento de empresa o testamento de negocio, es un documento legal que establece cómo deseas que se administre y se transmita tu negocio en el futuro. A diferencia de un testamento tradicional, el testamento empresarial se centra en las disposiciones relacionadas específicamente con la empresa y su gestión.
Una de las funciones principales de un testamento empresarial es designar a los sucesores que se harán cargo de la gestión del negocio en caso de su fallecimiento. Puedes nombrar a un heredero, a varios sucesores o incluso establecer un plan de sucesión detallado con diferentes roles y responsabilidades., según detallan desde el portal Piensa en grande.
Al establecer claramente quién será el encargado de dirigir la empresa en el futuro, un testamento empresarial puede prevenir disputas y conflictos familiares. Esto puede ser especialmente relevante si tiene varios herederos o si algunos de ellos no están interesados o capacitados para hacerse cargo del negocio.
Un testamento empresarial también garantiza la continuidad del negocio en caso de tu ausencia. Puede establecer directrices claras sobre cómo se deben tomar decisiones importantes, cómo se deben distribuir los beneficios y cómo se deben resolver posibles conflictos entre los sucesores.
plan de sucesión del negocio
Al tener un plan establecido para la sucesión del negocio, se proporciona estabilidad y seguridad tanto a los empleados como a los clientes. Esto ayuda a mantener la confianza en la empresa y asegura que las operaciones continúen sin problemas durante la transición.
Además de eso, un testamento empresarial puede permitir la planificación fiscal eficiente, lo que puede resultar en una reducción de impuestos y gastos asociados a la transferencia del negocio a los sucesores. Esto puede ser especialmente mejorado para proteger el patrimonio y garantizar que el negocio sea económicamente viable para las generaciones futuras.
Los expertos recomiendan al empresario que para planificar de forma eficaz el futuro de su negocio, debería crear un protocolo familiar que, junto al testamento, sirva para ordenar el futuro de la empresa según sus deseos.
Este plan o protocolo de sucesión debe establecer las reglas de dirección, la relación entre la empresa y la familia, y otros aspectos como retribuciones, organigrama entre herederos, permisos de venta del negocio familiar según compradores, entre otros.