Barrick Pueblo Viejo suscribió un acuerdo con el Instituto Tecnológico de Santo Domingo (Intec) para la creación del programa de becas para el doctorado en Ciencias Ambientales, como parte de su compromiso con el desarrollo social del país y el apoyo al sector educativo a través del fomento de las competencias en gestión ambiental.
El doctorado tiene entre sus objetivos la formación de investigadores, directivos y gestores de los procesos científicos de innovación tecnológica al más alto nivel, con la capacidad para desarrollar investigaciones, preparar a otros profesionales y dirigir procesos en el campo de las ciencias ambientales.
A través del convenio, Pueblo Viejo financiará una beca completa para cubrir la inversión en matrícula del doctorado con la posibilidad de extender el apoyo al proyecto de investigación de tesis del becario.
El programa tiene un enfoque en proyectos de investigación vinculados al manejo ambiental de Pueblo Viejo y los resultados de las investigaciones científicas que se realicen podrán ser implementados por la minera.
El convenio fue firmado por Juana Barceló, presidenta de Pueblo Viejo, y Julio Sánchez Maríñez, rector del Intec.
Barceló afirmó que la empresa que dirige se siente complacida de poder aportar al desarrollo del talento humano, porque con ello se garantiza una minería responsable.
“Tenemos como compromiso la transparencia, queremos que la gente tenga acceso a información sobre cómo desarrollamos nuestro trabajo y cómo garantizamos la minería responsable aplicando estándares internacionales”, dijo, al tiempo de manifestar el orgullo de trabajar con el Intec.
El instituto es la primera entidad de educación superior en el país con un programa en doctorado en Ciencias Ambientales bajo el enfoque de alianzas con los sectores públicos y privados, para la creación del conocimiento y las capacidades para la gestión ambiental.
Sánchez Maríñez valoró la continuidad de las relaciones entre la academia y Pueblo Viejo que se manifiesta en distintos ámbitos, como son los levantamientos ambientales que se realizan en la zona de operación de la minera, y en los aportes de la empresa a los programas de formación que desarrolla la universidad.
“Siendo un país turístico y minero debemos fortalecer nuestras capacidades a nivel ambiental, en los estudios de tipo ambiental, en la prevención, en la mitigación de riesgos ambientales, en el manejo de situaciones ambientales, porque es crucial para el desarrollo del país”, enfatizó.
La primera persona beneficiada con este programa de becas es Patricia Meléndez, profesional con más de 10 años de experiencia, y quien posee una maestría en ingeniería sanitaria y ambiental. Su propuesta de investigación está vinculada con evaluar opciones para el tratamiento pasivo de aguas ácidas con el objetivo de identificar opciones factibles, a ser consideradas en la etapa de cierre de Pueblo Viejo.
