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Al menos 21 personas han muerto y otras seis están desaparecidas después de una inundación repentina y un deslizamiento de tierra tras las lluvias torrenciales en las afueras de la ciudad de Xi’an, en el noroeste de China, dijeron el domingo las autoridades locales.
El desastre natural, que tuvo lugar el viernes en un pueblo en la ladera de una montaña, también provocó apagones que afectaron a 900 hogares y dañó caminos, puentes e infraestructura de comunicaciones, según el Buró de Manejo de Emergencias de la ciudad de Xi’an.
Partes de China han visto récord de altas temperaturas y inundaciones mortales en las últimas semanas, con expertos que vinculan el clima extremo en todo el mundo con el cambio climático.
Corte de señal de CNN en China durante reporte de inundaciones
Casi 1.000 rescatistas fueron enviados a la aldea Weiziping de Xi’an luego del deslizamiento de tierra y la inundación repentina, con 186 personas evacuadas y los esfuerzos de socorro en curso hasta el domingo por la noche, dijeron las autoridades. También quedaron destruidas dos casas.
El dueño de un restaurante en el pueblo le dijo al medio de comunicación estatal Cover News que un flujo masivo de lodo y escombros cayó en cascada por la ladera a última hora de la tarde del viernes, arrasando con dos edificios.
“Ambas casas desaparecieron y la gente también desapareció”, dijo.
El pueblo, ubicado en un pintoresco valle fluvial en las montañas Qinling, tiene varios restaurantes familiares que ofrecen comidas campesinas a los turistas, según la agencia estatal de noticias Xinhua.
Los restaurantes se quedaron sin las dos casas destruidas, informó Cover News.
“Xi’an hace calor en el verano y la gente viene a las montañas para escapar del calor. Nuestro pueblo no tiene muchos ingresos, la principal (forma de ganar dinero) es administrar restaurantes agrícolas en el verano”, dijo un segundo aldeano a Cover News.
El desastre viene de la mano de grandes inundaciones en el otro lado del país en el noreste de China, que fue azotado por lluvias récord de tifones regionales que comenzaron a fines del mes pasado.
Las inundaciones mataron al menos a 29 personas en la provincia de Hebei y 33 en la capital, Beijing, según las autoridades locales.
Otras 14 personas fueron reportadas muertas en la ciudad de Shulan en la provincia de Jilina medida que las lluvias avanzaban hacia el norte, inundando las tierras de cultivo en la zona productora de cereales del país.
Más de 1,5 millones de personas fueron evacuadas de sus hogares en Hebei, según los medios estatales, incluidos aquellos que necesitaban abandonar las «áreas de almacenamiento de inundaciones» designadas, que se inundaron cuando las autoridades de control de inundaciones soltó aguas reprimidas.
Las inundaciones dañaron o destruyeron casi 200.000 viviendas, y se espera que los daños generales del desastre cuesten más de 13.000 millones de dólares, dijeron las autoridades provinciales la semana pasada.
Las autoridades dijeron que tenían como objetivo que los desplazados regresaran a sus hogares el próximo mes.
Por separado, tres personas murieron y otras dos resultaron heridas en la provincia de Hunan el domingo después de que fuertes vientos provocaran el derrumbe de una casa en la aldea de Leyu, condado de Hengnan. Siete personas se refugiaban de las fuertes lluvias en la casa cuando se derrumbó, según la Radio Nacional de China.
